Vaya tela. En esta precaria situación pasó sus años de encarcelamiento en Philadelphia uno de los mafiosos más famosos de la historia. No era tratado por los guardias de una manera habitual, y mantenía todo tipo de contactos más alla de la verja. Pasó 10 meses entre 1929 y 1930 por posesión de un arma encubierta, más tarde fue encarcelado definitivamente por evasión de impuestos.
Y es que parece que puedes hacer lo que te de la gana en este mundo, pero cuidado con tocar el dinero del estado… sin ser político.